Aunque reconozco que se me cortaba el cuerpo cada vez que veía el anuncio en la televisión, es preciso admitir la eficacia de la campaña.

Si reflexionamos sobre cuándo una publicidad es efectiva, podemos decir que esta lo es cuando:

  • Recuerdas qué están publicitando y cómo te han hecho llegar el mensaje
  • Te sientes identificado con la imagen de marca
  • Recuerdas el nombre de la marca que vende el servicio/producto
  • Provoca impacto y, como consecuencia, reacción en el receptor. Por ejemplo, la compra del producto anunciado
  • Cubre una necesidad o soluciona un problema del receptor

Si tu publicidad consigue estos 5 check, ¡enhorabuena! Vas a triunfar como publicista y tu producto se prevé que sea un éxito en el mercado. Y esto es exactamente lo que me ha pasado con el último anuncio televisivo de la Dirección General de Tráfico y que considero un gran acierto.

Por un lado, mientras primero pensaba y luego organizaba mi escapada para los días festivos de Semana Santa, pude ver en varias ocasiones el anuncio en cuestión. Me sentí identificada con el mensaje: los fallecidos en accidentes de tráfico y la necesidad de salvar mi vida. Me quedó clarísimo que algunos de los que habíamos decidido desplazarnos en coche íbamos a morir – así de claro- y que uno de ellos podría ser yo o mi acompañante. Esto, corta el cuerpo y causa impacto.

El argumento, que suele ser indiscutible en estos casos, lo era más que nunca. No apelaban a la desgracia de la pérdida de un familiar, ni al cargo de conciencia o la responsabilidad, como en otras ocasiones. Llamaban a la estadística como aval. Al Big Data. Comparando con años anteriores, seríamos 36 los elegidos que nos quedaríamos por el camino.  

Hagamos que el Big Data se equivoque”, refería el anuncio. Aunque, reconozco, que todas las veces que lo vi pensé que tampoco había que provocar ganas de vomitar, el mensaje me caló. Durante el camino de ida y también mientras volvía. En una de las paradas recomendadas para descansar aprovechamos para cambiar de conductor: “no me jodas con el Big Data”, dije muy seria al conductor. Y a todos nos quedó claro.

Siempre digo que, como comunicadora, con que nuestro mensaje llegue de forma efectiva a una sola persona, habremos realizado un buen trabajo y el proceso comunicativo habrá sido un éxito. Así que, como comunicadora y como conductora, no tengo más que darle la enhorabuena a la DGT. Pero, sobre todo, tengo que darle las gracias.

La imagen de la portada es de Zamora24horas. com

Deja una respuesta